Día del Libro. La Prensa Ilustrada en los fondos del RCT
Como cada 23 de abril, desde 1995, se celebra el Día Internacional del Libro, sumándose el Real Casino de Tenerife a esta importante efeméride con una pequeña muestra de uno de sus fondos más valiosos e interesantes, el de Prensa Ilustrada.
Debemos remontarnos en el tiempo a los orígenes de esta institución en 1840 cuando se fundaba en la antigua Plaza de la Constitución, bajo la premisa de ofrecer a un grupo de socios, cincuenta y dos comerciantes y terratenientes de Santa Cruz de Tenerife, un Centro de Lectura y Recreo, como primera sociedad recreativa y cultural de esta ciudad que les permitiría celebrar tertulias, leer obras literarias y prensa. Paralelamente, en esa misma década surgiría en Europa un nuevo modelo de prensa, que llegando a través de los muelles de la ciudad otorgaría a estos ciudadanos la oportunidad de informarse y estar al día de lo que acontecía en el mundo que se extendía más allá del Archipiélago.
Entre finales del siglo XIX y la primera mitad del XX, comienza a fraguarse un nuevo modelo de prensa, con estilo y carácter editorial diferentes debido, entre otras razones, al progreso en los sistemas de producción fomentado por la Revolución Industrial, junto al desarrollo en comunicaciones y transporte, el avance del proceso técnico en las imprentas o el anhelo de educar. Las revistas ilustradas comienzan a tomar un prestigio y alcance mayor debido a la gran repercusión del papel de la Ilustración, un nuevo recurso y lenguaje diferente al modo tradicional de difusión de la información; una nueva técnica de carácter visual complementaria a los textos, la cual va adquiriendo un carácter más atractivo debido a las ilustraciones, grabados en madera o metal, en un primer momento, y litografías y fotografías que con el tiempo se fueron introduciendo. Se convertirían en el mejor medio para reflejar el mundo al mostrar los acontecimientos, paisajes, escenarios, retratos o simplemente la moda del momento.
Algunas de las primeras referencias respecto a la adquisición de este tipo de prensa en el Casino de Tenerife la encontramos en fuentes como Viaje a las Canarias, publicado en 1862 por D. Beningno Carballo y Wangüemert, natural de la Villa de Los Llanos de La Palma y catedrático de Economía Política en la Escuela de Comercio y en el Real Instituto Industrial de Madrid, el cual en las páginas 35 y 38 se refiere a las publicaciones presentes en el, por aquel entonces, aún Gabinete de Lectura de la siguiente forma: “…Le llevaré al Gabinete de Lectura y encontrará, si es por la noche, una veintena -al menos- de lectores, y si examina los títulos y epígrafes de los impresos, verá que son casi todos los periódicos y revistas políticas y literarias de Madrid, algunos diarios extranjeros y cuatro o cinco publicaciones del país, también se encuentran las ilustraciones española, francesa e inglesa, con lo cual podré asentar la siguiente afirmación: “ Aquí hay amor a la lectura…”. Además, según refiere el Reglamento de 1866 “el objeto de este establecimiento es el de procurarse en él, los socios que lo constituyen, distracciones y recreos honestos y permitidos, a la par que las ventajas que pueden obtenerse con la lectura de obras y periódicos políticos y literarios que adquiera[…]”. En las actas de las últimas décadas del siglo XIX (a partir de la sesión del 3 de enero de 1881) se hace mención a periódicos que se suscribirían y se suspenderían, algunos como los que se podrán observar en la muestra, y otros como El Correo, El Iris, Revista de Las Palmas, La Gaceta Universal, El Mundo político, Ilustración Alemana, Madrid Cómico, Dos Mundos, Revue des deux Mundus, Fígaro, El Heraldo de Madrid, entre otros, de los cuales no queda casi rastro en la colección bibliográfica actual.
Entre las publicaciones de prensa ilustrada que se pueden encontrar en la exposición figuran algunas de las más florecientes en Europa, que llegarían a manos de los primeros socios del Gabinete de Lectura en los años de su fundación, viendo la luz éstas también en ese periodo. Las cabeceras más consultadas incluían títulos internacionales como el reconocido The Illustrated London News, el cual aparece en 1842, y que cuenta entre sus páginas con la referencia manuscrita de pertenecer al Gabinete de Lectura y Recreo, hoy Real Casino de Tenerife, siendo el más antiguo en la institución que se conserva de 1845. También es de destacar el ejemplar también de 1845, de L´Illustration. Journal Universel, semanario francés publicado entre 1843 y 1944, e inspirado en el modelo británico, cuyo rasgo fundamental es el número y calidad de grabados contando con los mejores dibujantes de la época.
Con respecto a los rotativos de origen español que encontramos entre nuestras estanterías, y que tomaron como referencia a las revistas ilustradas europeas, estos ofrecerían a sus lectores crónicas y reportajes con secciones de temática variada junto a la inserción de grabados, litografías y fotografías, que acercarían una visión más cercana de la actualidad de la época. Entre los títulos que se adquirían estarían algunos como La Ilustración, Periódico Universal, revista de tirada semanal que aparecería por primera vez el 3 de marzo de 1849, y ejemplar con el que cuenta la institución; La Ilustración Nacional. La Ilustración Militar revista literaria, científica y artística, bajo la dirección de Arturo Zancada, en la que se recogen textos casi todos redactados por militares que mostraban la vinculación del Ejército con temática variada como la historia, la literatura y el arte, ilustrados con abundantes grabados; El Museo Universal, la cual era considerada una de las principales revistas ilustradas españolas de mediados el siglo XIX, y que hubo establecido en 1845 una de las más avanzadas imprentas, editoriales y librerías madrileñas, `Casa Editorial´; La Ilustración española y americana, siguiendo el modelo de las grandes revistas ilustradas europeas, se convertirá en el máximo exponente del periodismo gráfico español de ese siglo y aparece por primera vez el 25 de diciembre de 1869, dando cita a una larguísima nómina de destacados literatos, publicistas y periodistas entre sus páginas; Blanco y Negro editada en Madrid y fundada en 1891, más tarde se convertiría, junto a ABC, en base del grupo Prensa Española. Sería la primera publicación periódica española en utilizar el color y el papel couché, y el 12 de mayo de 1912 publicaría la primera fotografía en color de la prensa en España. Entre sus números encontramos almanaques, uno de ellos dedicado a regiones de España en el que por supuesto dedica unas cuantas líneas a Canarias junto a fotografías de Tenerife; Nuevo Mundo, fundada en 1894 por José del Perojo, colaborador asiduo de la La Ilustración española y americana y a partir de la cual se levantará Mundo gráfico, que terminará por comprar Nuevo mundo en 1913; Por esos mundos, que comienza a publicarse el 15 de enero de 1900, como suplemento de la también revista semanal Nuevo mundo (1894-1913). Por esos mundos, con el subtítulo Aventuras y viajes, ya había producido el año anterior otro título: Alrededor del mundo (1899-1930), divulgando lugares, viajes exóticos o expediciones y asuntos de la naturaleza, de antropología o de costumbres sociales; Mundo Gráfico, una de las revistas más populares y modernas del primer tercio de ese siglo dedicadas al fotoperiodismo. Fue la revista dirigida a un público más popular, de calidad inferior y más económica. Por último, La Ilustración artística, adornada con una magnífica colección de grabados debidos a los primeros artistas nacionales y extranjeros, estuvo redactada por los “más notables escritores nacionales” bajo la dirección de los barceloneses Montaner y Simón, cuya imprenta estaba especializada desde 1868 en publicaciones ilustradas de lujo, sacando esta revista de gran formato el 1 de enero de 1882.
Las Islas Canarias se convirtieron en un territorio con una posición estratégica de importancia geográfica y económica en estos siglos, destacando como escala para llegar a otros destinos o como región abierta a las corrientes expedicionarias y turísticas de viajeros europeos. El interés por las islas será el motivo de la gran producción bibliográfica que surge sobre éstas en estos siglos y será tanto en monografías como en la prensa de la época donde tengan presencia en diversos artículos periodísticos, algunos de ellos en estos ejemplares.